La galga favorita del príncipe Alberto, "EOS", pintada por Sir Edwin Landseer. Acompañó al príncipe desde sus catorce años y viajó con él a Inglaterra. Cuando Eos murió, con diez años de edad, fue enterrada en el cementerio familiar de palacio. Landseer se encargó de realizar un monumento a Eos para su tumba.

Eso, es amar a tu perro.

"SIEMPRE QUE VEO A UN CAZADOR SEGUIDO DE SU PERRO, LA ESCOPETA AL BRAZO, NO ME OLVIDO NUNCA DE DESEARLE BUENA CAZA. DICEN QUE ESA FRASE ES DE MAL AGÜERO". Julio Verne

viernes, 13 de septiembre de 2013

Si andas indeciso... ¡está claro!


Copio:

REQUERIMIENTOS OPCIÓN A:

Es un ser vivo que siente, precisa cariño y atención. A diario hay que alimentarlo, digiere y excreta. No es de intemperie: le afecta el frío y el calor. Es susceptible de contraer enfermedades o sufrir accidentes cuya resolución pasa por atención veterinaria con coste económico. Incluso gozando de salud precisa periódicas actuaciones (vacunas, antiparasitarios internos y externos, revisión). Si no se esteriliza tiene capacidad de multiplicarse. Hay que procurarle esparcimiento y ejercicio. Es inteligente, posee un carácter determinado, lo cual implica exigencia de educación. No es un autómata; tiene reacciones propias. No admite "aparcamiento" cuando hay inconveniente de llevarlo a algún lugar. Depende de nosotros. La lealtad es inherente a su naturaleza, si lo introducimos en nuestra vida esa condición ha de ser recíproca. No se devuelve. No es programable. Habremos de tener en cuenta nuestras circunstancias y variables, ya que, una vez en nuestra familia jamás se separará de nosotros. Habremos de respetar normas cívicas de convivencia. Envejece. Y nos partirá el corazón porque demasiado pronto, muere.


REQUERIMIENTOS OPCIÓN B:

Ninguno.


Tener un perro no es obligatorio, pero si decides tenerlo es para siempre. Y en las condiciones del supuesto A. Si no es el momento, aplaza la decisión. Medítalo. El abandono es una marcha atrás intolerable.

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